No me considero un artista, sino un obrero del arte, porque el arte es transformar, sorprender y crear.
No hay arte sin trabajo.
Convertir y reformar algo que para algunos no tiene valor en algo valioso, es arte. La casa botella es una de mis grandes composiciones y es el lugar donde vivo.
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El artista Rubén Adolfo Ingenieri también conocido como “Tito” nació en 1952. Durante la primer etapa de la adolescencia se interesó por el teatro de Artaud. A los 15 años se fue de su hogar para vivir en una casa especial. “La casa en el Arbol”. Rubén conoce en ese entonces a un “yankee” que había estado en Vietnam y era un experto en casas “cobijo”. La misma estaba creada sobre la copa de un árbol a 3 metros del piso muy cerca de la rivera de quilmes. Allí vivió algunos años.
En ese interín trabajaba en la “Artesanata” una casa de cueros y otros materiales donde creaba diferentes prendas y objetos para las personas de ese entonces.
Sus conocimientos de escultor los aprende de Oscar Albertazzi. Con él da sus primeros pasos en el arte.
En 1976 (época de la dictadura en Argentina) cae internado por un tema de consumo de estupefacientes en el neurosiquiátrico J. T. Borda.
Pasa 8 años en ese triste infierno donde se le practicaban torturas y picanas hasta que consigue escaparse como en una fuga de película.” Todos los días pensaba en el escape. Tenía que ser perfecto. El día indicado llegó y lo logré” Años después la amnistía del presidente R. Alfonsín lo libra de todos los cargos.
Fascinado por el Quijote de la Mancha, el maravilloso personaje de Cervantes, generó muchas variables que le permitieron ganar prestigio y calidad entre otras creaciones con surrealismo (en francés: surréalisme; sur [sobre, por encima] más réalisme [realismo]) para acercarse a su más maravillosa composición: LA CASA BOTELLA.
“Este lugar tiene un mensaje. Qué la gente la copie. Yo soñé con un barrio artesanal pero mis vecinos no se dieron cuenta. De este modo haríamos que nos visite el turismo y Quilmes crezca en otro aspecto con un material tan noble como el vidrio.
La casa esta hecha sin metro y sin plomada. Es una casa abstracta. Nadie puede tener la excusa de los impedimentos técnicos para realizarla”.
Ha realizado exposiciones en el Museo de Artes visuales de Quilmes, UNQUI,El Gato Viejo en lo de su amigo Regazzoni, y en diversas provincias de la Argentina.
Entre obras creadas para espacios públicos realizó en el Torreón del Monje (Mar del Plata) figuras de más de 1500 kg. El San Jorge para el Círculo médico de Quilmes. Las desventuras del Quijote para la casa de Cervantes en España, el Cristo para la capilla Sixtina en Italia, el homenaje al "Che" en Cuba, etc.
Muchas de sus obras se encuentran en colecciones privadas.
Contacto
dgnovel@gmail.com
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Biografía
El artista Rubén Adolfo Ingenieri también conocido como “Tito” nació en 1952. Durante la primer etapa de la adolescencia se interesó por el teatro de Artaud. A los 15 años se fue de su hogar para vivir en una casa especial. “La casa en el Arbol”. Rubén conoce en ese entonces a un “yankee” que había estado en Vietnam y era un experto en casas “cobijo”. La misma estaba creada sobre la copa de un árbol a 3 metros del piso muy cerca de la rivera de quilmes. Allí vivió algunos años.
En ese interín trabajaba en la “Artesanata” una casa de cueros y otros materiales donde creaba diferentes prendas y objetos para las personas de ese entonces.
Sus conocimientos de escultor los aprende de Oscar Albertazzi. Con él da sus primeros pasos en el arte.
En 1976 (época de la dictadura en Argentina) cae internado por un tema de consumo de estupefacientes en el neurosiquiátrico J. T. Borda.
Pasa 8 años en ese triste infierno donde se le practicaban torturas y picanas hasta que consigue escaparse como en una fuga de película.” Todos los días pensaba en el escape. Tenía que ser perfecto. El día indicado llegó y lo logré” Años después la amnistía del presidente R. Alfonsín lo libra de todos los cargos.
Fascinado por el Quijote de la Mancha, el maravilloso personaje de Cervantes, generó muchas variables que le permitieron ganar prestigio y calidad entre otras creaciones con surrealismo (en francés: surréalisme; sur [sobre, por encima] más réalisme [realismo]) para acercarse a su más maravillosa composición: LA CASA BOTELLA.
“Este lugar tiene un mensaje. Qué la gente la copie. Yo soñé con un barrio artesanal pero mis vecinos no se dieron cuenta. De este modo haríamos que nos visite el turismo y Quilmes crezca en otro aspecto con un material tan noble como el vidrio.
La casa esta hecha sin metro y sin plomada. Es una casa abstracta. Nadie puede tener la excusa de los impedimentos técnicos para realizarla”.
Ha realizado exposiciones en el Museo de Artes visuales de Quilmes, UNQUI,El Gato Viejo en lo de su amigo Regazzoni, y en diversas provincias de la Argentina.
Entre obras creadas para espacios públicos realizó en el Torreón del Monje (Mar del Plata) figuras de más de 1500 kg. El San Jorge para el Círculo médico de Quilmes. Las desventuras del Quijote para la casa de Cervantes en España, el Cristo para la capilla Sixtina en Italia, el homenaje al "Che" en Cuba, etc.
Muchas de sus obras se encuentran en colecciones privadas.